E.R.E Reunión 6 de septiembre
En esta reunión de la Comisión de bajas incentivadas, los sindicatos trasladamos a la dirección la siguiente propuesta:
1º.- La empresa cubriría lo que le faltara al trabajador, para junto con la prestación por desempleo en su caso, cobrar el 95% del salario neto, computando todos los conceptos salariales y sin excluir ninguno de los que pretendía en la reunión del día 2. Este complemento indemnizatorio se revalorizaría en un 0,62% anual, ya que sería el incremento del devengo de cada nueva anualidad.
2º.- Las cuotas del convenio especial con la seguridad social, que asumiría la empresa, se revalorizarían en la misma cuantía que lo hiciesen las bases de cotización al régimen general de la seguridad social.
3º.- A los trabajadores que por sus bases de cotización no tengan derecho a pensión máxima (de 150 a 200) se les pagaría el complemento indemnizatorio hasta los 65 años para que reciban la prestación máxima posible, y al resto hasta los 64.
4º.- Los trabajadores que con 63 años percibiesen la indemnización mínima de 20 días de salario por año de servicio por serles más favorable, que el pago fraccionado periódico, recibirían la indemnización de una sola vez igual que los de 64 y 65 años.
De esta manera la empresa generaría los ahorros pretendidos de 37 millones de euros, a fecha 31 de diciembre de 2015, si bien es cierto que pasada esa fecha las cantidades que tendría que pagar Metro serían mayores por cesar la prestación por desempleo y tener que asumir la totalidad de lo pagado al trabajador. Con esta propuesta el importe global de las indemnizaciones a pagar sería de 96 millones de euros, 21 menos que si se cubriese hasta el 100%.
La respuesta de la dirección de la empresa es que la indemnización a pagar a cada trabajador, debe ser cierta y determinada en el momento de la extinción del contrato y que por lo tanto no se pueden fijar las cuotas del convenio especial en función de lo que puedan subir las bases máximas; y que, además, ya ha previsto su revalorización en un 2%. Respecto a la pretensión de establecer diferentes edades para acceder a la jubilación dicen que el expediente de regulación tiene que ser generalista ya que no es un plan de pensiones individual. Dicen que además de generar ahorros hay que limitar el coste de las indemnizaciones ya que no pueden asumir un gasto de 96 mll. de euros, muy lejos de los 40 mll. que suponía su plan del 70 % anunciado en la reunión del pasado lunes, pues habría riesgo de situar a la empresa en situación de concurso de acreedores unido a los datos de descenso de viajeros. Esa cantidad en números globales estaría muy cercana a la que les correspondería abonar a razón de 45 días de salario por año de servicio, y afirman que la Consejería de Hacienda no daría su visto bueno.
Para terminar manifiestan que en otras empresas públicas las cantidades garantizadas han estado entre el 85 y el 90%, y que la dirección podría defender ante la Consejería cierta excepcionalidad, pero no un exotismo, dada la importancia de nuestra empresa para la actividad en Madrid.
Las posturas de Dirección y sindicatos siguen estando muy alejadas (70-95%). Hemos quedado citados para mantener reuniones durante todo el martes 10 a partir de las 10 de la mañana para conseguir acercar posiciones y alcanzar un preacuerdo o admitir el desacuerdo.
Los trabajadores y sindicatos no podemos perder la visión de globalidad, y si bien es cierto que se puede alcanzar un acuerdo en cuanto a los despidos, se han de mantener unas condiciones mínimas para los trabajadores que quedamos en activo en Metro.
Durante este verano, y sin haberse ido nadie, ya hemos visto la falta de personal en la Operativa, sin cubrirse el servicio en estaciones y en trenes. Nosotros estamos aquí para algo más que para hacer números. Esta empresa tiene que seguir funcionando siendo pública, no se puede admitir que un viajero permanezca atrapado 26 minutos en un ascensor porque no haya nadie de estaciones en esa estación para auxiliarle, debido a la falta de personal, ni que no se pueda disfrutar de la media hora de descanso hasta las diez de la mañana o que falten trenes en línea, en las ya diezmadas tablas, por falta de personal.
Desde Solidaridad Obrera seguimos viendo que la empresa no tiene intención alguna, ni interés, en acordar este plan y el convenio colectivo que le debe acompañar. Por nuestra parte haremos el esfuerzo negociador necesario, pero que nadie espere milagros: si no hay movilización difícilmente podrá arrancarse nada bueno a la otra parte. Preparemos las movilizaciones necesarias si queremos conseguir un convenio decente o sigamos esperando que el desastre se concrete.
Madrid 6 de septiembre de 2013
Por Solidaridad Obrera
LA JUNTA SINDICAL