GRUPO DE TRABAJO DE HUMOS DIÉSEL 18/10/22.

Pese a las prisas que a tod@s nos acucian frente a este riesgo, y las condiciones que sufren l@s trabajadorxs usando Equipos de Protección Individual (EPI) que no son precisamente cómodos, para estar protegidos frente a este cancerígeno, la empresa se está tomando con muchísima calma la adquisición e instalación de extractores de humos en todos los lugares cerrados en donde se mantienen o se aparcan las dresinas. Estos sistemas, indicados por Solidaridad Obrera a Metro, constan de algún tipo de fijación estanca al tubo de escape, un carril de desplazamiento y un tubo que, mediante extracción forzada, garantiza que los lugares de trabajo no tengan nada de humo y que los EPI sean innecesarios, pues la extracción se conectará antes de la entrada al “garaje”, y acompañará al vehículo hasta su “plaza”. En la operación de salida es aún más eficaz, soltándose solo al final del carril. Medios normales, razonables, comunes, que Material Móvil se resistió a adoptar (al principio) pese a reconocer que los sistemas de extracción presentes eran deficientes o estaban muy deteriorados, como quien tiene un tío de Alcalá. Frente a las distintas alturas de los tubos (techo o bajos), y los que tienen forma de “T”, nos aseguraron estar buscando la mejor opción. Intentaremos participar en estos trabajos, pues las malas inversiones, basadas en malas decisiones, siempre las pagamos l@s de abajo.
Sobre las charlas informativas que Metro debiera dar a todo el personal que trabaje cerca de estos humos, aunque no sea directamente, nos aseguraron que algo harán. Esta información será extraída de la IG-15, sobre humos diésel, que esperemos se haga tan famosa como la IG-12 de amianto. Lo malo, en este tema, es que esta compañía vuelve a confiar en la palabra de los mandos intermedios para trasladar esta información, pese a que cuando lo han hecho con documentos y diapositivas estos mandos han decidido obviar u omitir lo escrito en esos documentos consensuados, conculcando los derechos del personal de base sin ningún reparo. Para evitarlo, solicitamos la creación de una “píldora” formativa con cuatro o cinco diapositivas, recibiendo como respuesta un “…”.
Sobre las medidas técnicas/tecnológicas para reducir la emisión de partículas, como de los gases más peligrosos, nos informaron de diversos problemas con algunos filtros y con algunas dresinas. Siendo este un ejercicio de desarrollo de soluciones, es normal que algo se queme o que haya que ajustar ciertas variables. Nos alegramos de ver/conocer que pese a todas las reticencias, esta compañía ha encontrado la valentía de hacer su trabajo. Así mismo, sobre la limpieza con hidrógeno (también trasladada por Solidaridad Obrera), nos informan que realizarán alguna prueba más para establecer una periodicidad (pues su utilidad ha quedado demostrada) y que, tras finalizar el contrato, pretenden adquirir una de estas máquinas para que podamos realizar dichas limpiezas nosotr@s mism@s. Otra decisión que aplaudimos.
Sobre el punto de la gestión de los Equipos de Protección Individual, una vez desechados como residuos peligrosos y/o contaminantes, nos informan poco o nada, pues Obra Civil se olvidó de recabar la información del Servicio de Limpieza y Medio Ambiente. Aseguran que no es necesario tratarlo como residuo “especial”, pero que tratarán de dar algún detalle…otro día.
La escasez de medidores de monóxido de nitrógeno, parece cosa del pasado, pues el Servicio de Prevención aseguró haber recibido y entregado los medidores solicitados por cada departamento de esta compañía. Recordamos a TOD@S l@s trabajadorxs de esta compañía que nadie debe trabajar en la cercanía de dresinas sin al menos un medidor por equipo. Este “equipo” se conformará de trabajadorxs que vayan a estar realizando tareas similares conjuntamente, pudiendo generalizar la medición a todas las personas que lo conformen.
Por último, se trató el problema (actual, de futuro habrá extractores) de la entrada y salida de dresinas en las distintas zonas de mantenimiento de las mismas. Hasta ahora, se pretendía hacerlo con un remolcador eléctrico evitando cualquier tipo de humo, pero el descubrimiento de que dicho vehículo no debe arrastrar masas tan grandes ha desbaratado los planes de considerar la zona de “puesta a punto” como zona limpia, una zona sin obligación de mascarilla y mono. Metro confesó tener otros dos remolques con mayor capacidad a un paso del desguace, viéndose obligados a realizar sendos contratos para repararlos. Esperamos que ambos remolques estén operativos cuanto antes, pues tener zonas limpias es, por ahora, lo mejor que podemos ofrecer al personal de Vehículos Auxiliares.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *