En contestación a la campaña de la Dirección poniéndo en duda la profesionalidad de los conductores de Metro estamos repartiéndo este comunicado a los viajeros. Por su interés lo reproducimos como aviso.

¡¡CUIDADO CON LAS CARTERAS EN EL METRO!!

La Dirección de Metro ha ordenado a las contratas de seguridad privada que operan en el Metro que vigilen a los conductores de los trenes. Para ello los vigilantes se pasan el grueso de su jornada laboral en los andenes pendientes de cómo actúa cada conductor. Los carteristas campan a sus anchas mientras tanto haciendo su agosto, sobre todo entre los que se dirigen hacia estaciones de autobús, Renfe o Aeropuerto. Recomendamos encarecidamente que tengan especial cuidado de sus pertenencias cuando viajen en Metro.

¿POR QUÉ OCURRE ESTO?

Todos hemos oído hablar del lamentable accidente en las cocheras de Loranca, sucedido el 7 de agosto, en el que perdieron la vida un Directivo de Metro, responsable del mantenimiento de los trenes, y una joven suiza de 17 años, y resultaron heridos la compañera del directivo y su hijo. La Dirección de Metro en vez de asumir responsabilidades cesando a quienes nombraron al directivo fallecido (por la demostrada negligencia y falta de responsabilidad para ejercer cargo alguno), busca expiar sus responsabilidades entre el colectivo de conductores de Metro, que nada ha tenido que ver en ese suceso, pretendiendo hacer un listado de conductores que vayan acompañados de otros trabajadores en la cabina de conducción del tren o que viajen en la cabina de cola del tren. Para este cometido están empleando las contratas de vigilantes jurados.

Por el contrario desde la Sección Sindical de Solidaridad Obrera de Metro PROPONEMOS cuatro medidas de ahorro que ayudan a defender el servicio público de transporte que prestamos a los trabajadores y trabajadoras de Madrid:
1º.- La revisión de todos y cada uno de los cientos de contratos de trabajo realizados a dedo en los últimos diez años, sin pasar por concurso-oposición en el INEM, ni proceso alguno. Rescindiendo los contratos de aquellos “enchufados” que se demuestren innecesarios para la prestación de este servicio público de transporte y la eliminación de todos los cargos directivos de nueva creación sin funcionalidad práctica.
2º.- La anulación de los contratos con las empresas de seguridad privada, pues visto que el grueso del trabajo realizado que ahora tienen encomendado sus empleados consiste en vigilar y controlar a los trabajadores de metro, su permanencia en Metro carece de sentido, ahorrándose con esta medida cientos de millones de dinero público.
3º.- El establecimiento de un salario máximo a percibir en Metro de Madrid, empresa pública, que no sobrepase en ningún caso los 75.000 euros anuales. Pues en la actualidad hay cerca de cien directivos (niveles 1, 2 y 3) que perciben salarios astronómicos, superando incluso lo percibido por el presidente del Gobierno, sin que se conozca utilidad alguna en su labor, y elegidos por “amiguismo” sin que se conozca ningún otro mérito.
4º.- Con el ahorro obtenido por las tres medidas anteriores se deben rebajar las tarifas, y en concreto los abonos mensuales de forma ostensible.

Madrid, 16 de agosto de 2012
Por Solidaridad Obrera
LA JUNTA SINDICAL